Ya antes de que llegue
la noche, pienso en ti,
fijando la mirada en aguas de montaña
que caminan al mar.
Se que al final me esperas
contemplando otras aguas
y en ellas nos unimos.
Cuando llega la noche, por ambos deseada, miro al cielo buscando la estrella que nos une, y cuando lo consigo me siento confortado en nuestra lejanía. Y recuerdo los versos de un soneto de Neruda que expresan lo que siento.
Ya eres mía. Reposa con tu sueño en mi sueño.
Amor, dolor, trabajos, deben dormir ahora.
Gira la noche sobre sus invisibles ruedas
y junto a mí eres pura como el ámbar dormido.
Ninguna más, amor, dormirá con mis sueños.
Irás, iremos juntos por las aguas del tiempo.
Ninguna viajará por la sombra conmigo,
solo tu, siempreviva, siempre sol, siempre luna.
Ya tus manos abrieron los puños delicados
y dejaron caer suaves signos sin rumbo,
tus ojos se cerraron como dos alas grises,
mientras yo sigo el agua que llevas y me lleva:
la noche, el mundo, el viento devanan su destino,
y ya no soy sin ti sino solo tu sueño.
Soneto LXXXI. “Cien sonetos de amor” (Pablo Neruda)
Gran Neruda...
ResponderEliminares bueno, amor, sentirte cerca de mí en la noche,
invisible en tu sueño, seriamente nocturna,
mientras yo desenredo mis preocupaciones
como si fueran redes confundidas.
Ausente, por los sueños tu corazón navega,
pero tu cuerpo así abandonado respira
buscándome sin verme, completando mi sueño
como una planta que se duplica en la sombra.
Erguida, serás otra que vivirá mañana,
pero de las fronteras perdidas en la noche,
de este ser y no ser en que nos encontramos
algo queda acercándonos en la luz de la vida
como si el sello de la sombra señalara
con fuego sus secretas criaturas.
Genial Gaviero
Lo que es genial, Madi, es compartir sonetos hermosos y llenos de sentimiento.
ResponderEliminarGracias por hacerlo
Neruda y Miguel Hernández fueron los primeros poetas que me deslumbraron, los que encauzaron mi gusto por leer poesía. Es una deuda que siempre tendré con ellos.
ResponderEliminarHacía tiempo que no leía esos sonetos de amor.
Aunque a mí, del Neruda amoroso, lo que más me gusta son Los versos del capitán.
Gracias por traerlos de nuevo a mi memoria, a mi corazón.
No todos los momentos se pueden contar. A veces, nuestros momentos sólo los entendemos nosotros, y al explicarlos pierden su sentido. Es una suerte, por lo raro, poder tener a alguien a quien contarle los momentos de uno y que los entienda y sienta como suyos.
ResponderEliminarBesos.
Interesante, como todo lo que sueles publicar.
ResponderEliminarSalu2.
GRACIAS POR COMPARTIRLO!!!
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