Un dia u otro todos nos hemos sentido solos, fuera de lugar.
Esperamos que ocurra un milagro, pero pasan las horas y no ha sucedido nada.
Necesitas escuchar palabras amables dirgidas y pensadas para ti, pero no ocurre.
Entonces sientes la angustia de la soledad, la incomprensión y no entiendes cómo el corazón puede aguantar tanta amargura.
A veces la soledad y el silencio pesan demasiado y necesitas que te digan que no pasa nada, que todo tiene solución, que no eres una persona tan estúpida como alguien quiere hacerte creer.
Me gustaría poder reinventarme un poco cada dia, y si en alguna ocasión he afirmado que si pudiera congelaría algunos segundos vividos, hoy actuaría de una manera totalmente distinta. Nada de lo que permanece congelado me atrae ni me parece sugerente.
Hoy es uno de aquellos días en los que pienso que si pudiera convertirme en la mujer invisible sería genial.
Hoy quisiera escribir mucho, llenar páginas y mas páginas hasta cansarme, pero los dedos no me siguen... están caprichosos, como un dia lo estaban las letras.
Esperamos que ocurra un milagro, pero pasan las horas y no ha sucedido nada.
Necesitas escuchar palabras amables dirgidas y pensadas para ti, pero no ocurre.
Entonces sientes la angustia de la soledad, la incomprensión y no entiendes cómo el corazón puede aguantar tanta amargura.
A veces la soledad y el silencio pesan demasiado y necesitas que te digan que no pasa nada, que todo tiene solución, que no eres una persona tan estúpida como alguien quiere hacerte creer.
Me gustaría poder reinventarme un poco cada dia, y si en alguna ocasión he afirmado que si pudiera congelaría algunos segundos vividos, hoy actuaría de una manera totalmente distinta. Nada de lo que permanece congelado me atrae ni me parece sugerente.
Hoy es uno de aquellos días en los que pienso que si pudiera convertirme en la mujer invisible sería genial.
Hoy quisiera escribir mucho, llenar páginas y mas páginas hasta cansarme, pero los dedos no me siguen... están caprichosos, como un dia lo estaban las letras.
No estaría bien que te convirtieses en la mujer invisible, Madi. Ni sería genial. Al menos, no lo sería para nosotros.
ResponderEliminarCuando uno siente que la angustía y la soledad hacen acto de presencia y siente amargura en el corazón, lo mejor es buscar la rebeldía que hay dentro de nosotros, llenarse de genio y pulsar la tecla de la lucha por la Vida, dejar correr la pasión por nuestras venas y fluir en contra de los pensamientos negativos que pugnan por dominar nuestro carácter. La Vida es como es y no como nosotros queremos, pero eso no es necesariamente malo. Y, si eres justa, estoy seguro que tienes un montón de detalles pequeños que llenan de color ese corazón que hoy aparece gris.
Madi, somos latinos, no hay sitio para la tristeza en un corazón latino. No lo hay. Cuando algo duele, nosotros cogemos una guitarra, tocamos palmas y gritamos con el corazón y con el alma que podemos con la Vida. En la Vida como en el deporte, los latinos, los españoles... podemos... y lo logramos como así lo demuestran los éxitos cosechados ultimamente.
Y una cosa más, Madi... Si te pudieras reinventar, personalmente, me gustaría que volvieras a ser la misma mujer, la misma dama y ¡olé! ;-)
Cuídate guapísima que tú lo vales ;-)
Un beso,
Maverick
...
Coincido totalmente con Maverick, eres como eres y nos gustas así. Mejor dicho, eres así. Si cambiaras, si te hicieras invisible, si no tuvieras momentos de angstia, de soledad, de tristeza, de cansancio... tampoco los tendrías de alegría, de ganas de vivir, de transmitir fuerza, de ser querida en todos los campos, como familia, como amiga, como cmpñera, como amante... Tu eres sensibilidad y vida. Cagoen¡¡¡¡
ResponderEliminarQue vas a tener que recibir carta me temo (y amenazo)
Besazo