martes, 15 de diciembre de 2009

Recuerdos de una época

Este Kush para ustedes, por iluminar mi vida,






Voy a contarles un recuerdo que tengo de ésta época.
(Ya parezco una abuelita )

Cuando yo era una niña, hace muuuchoooooo tiempo, diciembre siempre fue un mes muy especial para mi, comenzaba con el regalo de fin de curso que mis padres y mi abuela me daban por pasar de año con excelente, luego venía mi cumpleaños y como tuve la suerte de tener a muchos ángeles a mi alrededor que me mimaban en extremo, era un día espectacular, luego mi santo y más regalos los cuales finalizaban con Papá Noél y Los Reyes Magos.

Fue una niñez maravillosa como de cuentos de hadas, se convirtió en una adolescencia hermosa, con los contratiempos de toda joven que se cree la dueña del mundo y fascinada por ese nuevo movimiento punk que venía de USA y UK, pueden imaginarse, mi vida era una mezcla de Beatles (amores desde los 11 años), Ramones recién horneaditos, con llamados y encuentros con aquél ¡¡que se parecía a Paul McCartney o el otro que se parecía a Johnny Ramone!! Del estudio ni hablamos, desastre total, ni sabía dónde tenía los libros, porque mi dormitorio estaba lleno de revistas que me traían de Buenos Aires o de San Pablo, sobre el movimiento punk.

Por supuesto que hubieron discusiones, las notas se fueron en picada y mi madre me amenazó con ponerme en un colegio de monjas, creo que ésto fue sólo una amenaza, pero me asusté mal ...
Cuando todo estaba en estado burbujeante y por estallar, tuve la charla más bonita que se puedan imaginar, no salió de mi, sino de uno de mis ángeles, el que hace poco se fue .... él me hizo analizar todo desde un punto de vista tan humano que toda aquella rebeldía se fue desvaneciendo y entendí qué era lo que querían para mi, cuánto me querían y con qué absoluta humildad intentaban que razonara ... era una tarde de diciembre, el sol nos iluminaba, estábamos sentados bajo unos árboles ... en ese momento me di cuenta del amor puro que no pide nada a cambio ... lloré, pedí perdón y dije que haría las cosas bien.

Han pasado ya más de tres décadas de todo eso, pero en la actualidad todavía existe mi regalado diciembre, obviamente no tengo término de curso, por tanto ese regalo me falta, los otros están todos ... no como quisiera ... pero eso ya es otra historia.
Megan

Gracias Megan, tú si que iluminas la vida a todos los que tenemos la suerte de conocerte, muchas gracias por ser así.Gracías por estar siempre ahí. Y sobre todo gracias por aguantarme a mí porque siempre me das mucho más de lo que yo te doy a ti. Un abrazo querida amiga y feliz navidad

3 comentarios:

  1. Hermoso! Precioso! Me encantó leer esto.

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  2. Ah, esa nostalgia de la infancia, de la adolescencia, de la juventud...
    Pues, os falta lo mejor. La experiencia, que soy yo, quiere haceros un anuncio:Entre los 45 y los 55, se vive una "década prodigiosa". El cuerpo está bien y la mente desarrollada plenamente.
    Se separa el grano de la paja. Se sabe lo que tiene importancia y lo que es circunstancial. Vividlo. Merece la pena.
    Y gracias por esa luz.

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  3. Este texto merece que te coman a besos. Muestra lo cruel que es la vida, la fea realidad de hacerse adulto. La vida... Nos hace pensar que nos vamos a comer el mundo y, luego, nos derriba sin piedad y nosotros le pedimos que el mundo no nos coma. Así con todos.

    Es tan plástico el texto, tan sencillo, tan directo. Con pocas palabras, expresas mucho, Megan.

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