Lo que mueve el mundo, de Kirmen Uribe,
autor de otras obras como Bilbao-New York-Bilbao (Premio Nacional de Narrativa
2009) o Mientras tanto cógeme la mano (Premio de la Crítica 2007 por el PEN
American Center), es una novela de narrativa española que nos narra una
historia de exilio contada con la sensibilidad, la ternura y el talento
narrativo de Kirmen Uribe. Una novela sobre la amistad y el amor, el compromiso
y la lealtad, y la irreversibilidad de las decisiones que marcan toda una vida.
Lo que mueve el mundo es un libro conmovedor sobre una infancia marcada por el
desarraigo, una historia mezcla de realidad y ficción, ambientada entre los
periodos de la Guerra Civil y la Segunda Guerra Mundial hasta llegar a nuestros
días.
En mayo de 1937, miles de niños vascos
partieron del puerto de Bilbao rumbo al exilio. Entre ellos se encontraba
Karmentxu, una niña de ocho años que fue acogida en Gante, Bélgica, por el
escritor Robert Mussche. La vida de Robert cambiará con la llegada de la niña,
su implicación en la resistencia durante la Guerra Civil y el advenimiento de
la Segunda Guerra Mundial. Heredera de Sostiene Pereira de Tabucchio El último
encuentro de Sándor Márai, esta novela es la historia que el propio autor le
cuenta a su mejor amigo, recientemente fallecido, «la historia de un héroe
anónimo, de esos que vemos por la calle». La voz cálida que da forma a Lo que
mueve el mundo susurra lo esencial para recuperar lazos familiares perdidos, en
un relato que hilvana las escenas, guarda los silencios del olvido y recrea el
instante fugaz.
Acabo de finalizar la lectura de este
libro y me ha gustado muchísimo. Amistad, ideales, amor, exilio,
compromiso, lealtad y también altruismo, son los temas que trata. Pero
sobre todo de la amistad.
“…Un amigo te aceptará tal
como eres, defectos incluidos, aun cuando por un momento lo dejes de lado. Y, a pesar de que pase
mucho tiempo sin que esteis juntos, no se preocupa; para un amigo, el tiempo
tiene otra medida, así que no se apura. Te pondrás a hablar con él como si os hubierais
visto la víspera…”
Narra un periodo en la historia de humanidad en la que muchos inocentes sufrieron la barbarie de la guerra. Niños que tuvieron que emigrar y separarse de sus familias y aunque algunos de ellos volvieron a sus casas cuando llegó la paz, nunca mas volvieron a ser los mismos tras esa dolorosa y traumatica experiencia. Después de interminables horas de viaje en un barco cuando llegaban a puerto separaban a los hermanos y los llevaban con familias distintas. Tuvieron que adaptarse a otro tipo de vida. Con personas que hablaban un idioma desconocido para ellos y costumbres también totalmente distintas a las que estaban acostumbrados.
Me ha parecido un libo magnífico, escrito
con tal delicadeza y sensibilidad que consigue que el lector se implique en la historia. Con los últimos párrafos alguna lagrimilla se me ha escapado. Me gusta la literatura comprometida si está bien contada. Bien
por Kirmen, creo que su amigo, a quien dedica este libro, allá donde esté se sentirá muy orgulloso de él
Esta síntesis del libro me hizo recordar a las historias de Ema, una querida amiga fallecida hace poco tiempo, sobre su exilio en Francia durante la Guerra Civil, junto a sus hermanos, ubicados todos en hogares diferentes. Ellos tuvieron la entereza de reconstruir sus vidas y formar hogares forjados en el compromiso y la solidaridad.
ResponderEliminarVoy a leerlo
Me lo apunto Madison, tiene pinta de ser una preciosidad de historia. Gracias por descubrírmela
ResponderEliminarQuisiera no olvidarlo. Me gustaría leerlo.
ResponderEliminarGracias por esta reseña vital, Madi.