Mi querida amiga:
Sabes que estos días pienso mucho en ti.
Se que estás atravesando por un momento dificil y delicado, que lo estás pasando mal y me gustaría en circunstancias así estar fisícamente a tu lado, pero eso ya sabes que es totalmente imposible, aún así, a pesar de la lejanía sabes que tienes todo mi apoyo y cariño, que me hago partícipe de tu tristeza.
A veces hay sueños que antes de cumplirse, sin haberlos vivido en toda su plenitud se truncan, y llega la pena de no poder verlos convertidos en realidad
Se que ahora sientes rabia , pena, impotencia por lo que pudo haber sido y no fué. Porque estuviste muy cerca de conseguirlo, porque a pesar de los muchos inconvenientes creías que existía un vinculo inrrompible, pero no ha sido así.
Y ahora lloras y tu vista a causa de tanta lágrima te hace ver todo borroso, crees que el recuerdo nunca llegará a borrarse, que su imagen siempre estará presente en ti con la misma nitidez.
Pero no es así querida amiga; llegará un día en que sin avisar y sin darte cuenta la pena, la tristeza y la pizca de rencor que en estos momentos sientes se convertirán en caricias, en un mágico recuerdo y en una buena historia para recordar.
Y perdonarás ese sueño imposible que pudo ser pero no fué.Porque de alguna manera continuas viviendo en él.
Y llegará ese día que notarás la llegada de la primavera como si fuera la primera vez, y, seguro que alguien se acercará a ti y te dará un beso y lo sentirás como si fuera el primero y entonces, en ese momento, cuando dirigas tu mirada a los nuevos ojos sentirás cómo un nuevo sueño empieza a germinar y todo volverá a empezar.
Te darás cuenta de que todo es cíclico y perecedero. Todos llevamos nuestra fecha de caducidad.
Sin nada más se despide tu amiga que te quiere.
No sé de quién es esta carta ni a quién va dirigida, pero si ella es una persona real, le mando mucha fuerza para atravesar ese momento de dolor y oscuridad, le abro un haz de luz amiga dirigido a lo más alegre y querido de su vida actual para que le haga darse cuenta de que la vida, incluso sin esa historia imposible, merece nuestra mirada, nuestro pequeño esfuerzo y nos proporciona placer y bienestar.
ResponderEliminarSólo eso.
Hola Anderea, me alegra leerte.
ResponderEliminar¿Sabes? creo que en algún momento de nuestras vida todos somos esa persona a la que dedico la carta.
Un abrazo y vuelve
Gracias, Madison.
ResponderEliminarA mí también me alegra leerte.
Un abrazo y volveré.