Te inivitaré a venir conmigo, cogerás mi mano, y yo me apoyaré en tu brazo. Descubriremos que nuestros pasos avanzan hacia la misma vereda.
De vez en cuando haremos un alto y descansaremos, entonces yo me acercaré a tu oído y te diré palabras, algunas te gustarán porque son esperadas, pero habrá otras que no comprenderás porque las llevo escondidas.
Pero ninguna te dejará indiferente y llegará el día que recordarás las que dije y las que callé.
El tiempo lo dirá. Y cuando extrañe extrañarte te buscaré.
Y en mi pizarra de números y evaluaciones pondré un cero a cada milímetro de tristeza
Si la tristeza puede contarse en milímetros tampoco preocupa mucho. Lo peor de la tristeza es cuando se convierte en un mar infinito, en quilómetros y en quilos (o peor, en kilómetro y en kilos), en desiertos.
ResponderEliminarMis intenciones quiero que sean a partir de hoy como las tuyas.
Tus cartas cada vez son más poéticas, elegantes y galantes.
ResponderEliminarMe copio lo de "Y cuando extrañe extrañarte te buscaré"
Un abrazo.
Es muy bonito lo que has escrito cielo. Hoy me gusta especialmente.
ResponderEliminarbesos
Conmovedora prosa, bella y cautivante.
ResponderEliminarUn cordial abrazo.
Ojalá tuvieramos la suficiente osadía y vehemencía para coseguir paliar la tristeza, ese nudo que se encaja en el estómago y hace que casi no podamos respirar.
ResponderEliminarOjalá..
Un abrazo Ramón
Me sonrojo al leer tu comentario Presley, muchas gracias.
ResponderEliminarYo encantada de que te guste leerme
Un beso
Muchas gracias Marina, que bien verte aquí, me hace ilusión, de verdad
ResponderEliminarUn beso
Qué tal Gustavo? es una inmensa alegría verte nuevamente. Y un lujo que te apetezca comentar aquí
ResponderEliminarUn abrazo con todo mi cariño
Me gusta asi, cuando se ven las escenas de las palabras aconteciendo en mi mente segun las leo.
ResponderEliminarSigo visitándote. Y sigo disfrutándote con carácter retroactivo. Al no venir a diario, me encuentro, como hoy, con varias entradas que degustar.
ResponderEliminarUn placer, como siempre.
Y un abrazo, casi como siempre.
Mario
madison, me gusta mucho la conjunción de la foto con tus palabras.
ResponderEliminarEl buen gusto en ilustrar con fotos o dibujos de calidad tus palabras o la de quienes tu seleccionas ,siempre fue una característica de este espacio.
Madison,fue una alegría ver tu comentario en mi nuevo blog(que nunca falte).
Si quieres pasa por alli ,pues Incal esta de nuevo entre nosotros.
Un gran abrazo.
Cuando escribo intento ser totalmente fiel a lo que imagino o a lo que sucede.
ResponderEliminarUn placer verte Espinar
Un beso
Querido Mario, que voy a decirte que no sepas. La complicidad es algo inanto. Las palabras que un día nos dijimos quedan para siempre, y eso es bueno, eso está bien.
ResponderEliminarNo vienes a diario, pero me piensas a diario. Yo lo sé. Yo lo hago.
Un abrazo también para ti, casi como siempre, o algo así.
Besos
flamel, nos seguimos desde hace mucho, qué mas da el nombre. Lo importante es la persona y su grandeza, y tú eres grande.
ResponderEliminarMuchas gracias por tus palabras, me hace mucha ilusión que pienses así, tú que tiene un blog tan maravilloso.
Ya soy asidua de tu casa, como siempre lo fuí.
Un abrazo Luís