Nos empeñamos en buscar explicación a aquello que no
la tiene, deseamos con tal intensidad que nos avergüenza reconocerlo. Negamos
lo evidente y no nos damos cuenta de que lo inexplicable traspasa cualquier límite
y razón.
Que los momentos mas electrizantes de nuestra vida
son aquellos que no necesitan de certezas ni promesas, si acaso con algo de
complicidad es suficiente.
Fotografía de Man Ray
Es verdad que sin complicidad parece difícil tener, atesorar, algún momento importante de nuestra vida. Parece que tiene que haber otro -en algún sentido- para darle un rango, una entidad reseñable a algo que nos ocurre.
ResponderEliminarPara una historia de uno, tiene que haber -por lo menos- dos.
¿No?
Un beso.
Exacto y además se necesita la necesaria implicación de ambos para poder seguir adelante y viviendo.
ResponderEliminarBeso, Blanco