De tanto en tanto revivo mentalmente aquellos momentos, y me doy cuenta de que siempre que lo hago me invade una sensación extraña, una mezcla de melancolía y tristeza, y aún así no puedo evitar sonreír al recordar todo lo vivido.
Y pienso, que si pudiera me gustaría retroceder en el tiempo con el fin de reparar la tristeza que nos ocasionamos con nuestro comportamiento, aunque tengo la impresión de que algunos errores son irreparables.
Mi pensamiento regresa al ahora. Tomo un pequeño sorbo del café que hace unos minutos el camarero me ha traído a la mesa. Ocasionalmente también recuerdo el día que volviste, la impresión que me produjo verte de nuevo. Te vi distinto y así te lo dije. Es que he cambiado, fue tu respuesta. Pero ya era tarde. Se te escapó el tiempo. Que conste que te avisé. Sigo estrujándome la memoria, intento llegar al origen ,me pregunto en qué momento empezó el principio del fin. Qué fue lo que dio lugar a tanto despropósito.
Decían, los que nos conocían, que éramos la pareja perfecta. Yo, también lo creía. Empezamos a construir una vida a nuestra medida , poco nos faltó para lograrlo.
Imagen de Marta Glinska
Erais la pareja perfecta, ¿por qué me sonará tanto esa frase?
ResponderEliminarPorque es demasiado habitual quizá?
ResponderEliminar:)
Un abrazo, Juanjo