Iain Faulkner
Quiero que sepas que con el paso de los días las facciones de tu rostro van desdibujándose de mi memoria
Que tu voz se diluye despacito, como el azúcar al mezclarse con el café
Y extrañamente con del día a día, te pienso y te siento con una intensidad que duele.
Cuando te pienso siento descargas eléctricas que se introducen por cada poro de mi piel.
Cuando te siento descubro que cosas de mi que hasta ahora no conocía.
Llévame contigo allí donde deberíamos estar. Donde sabemos que está nuestro lugar.
Retomemos lo imposible, lo improbable. Desafiemos a la vida, al mundo
Mírame y dejate seducir, descarga tu mirada de deseo sobre mí
Qué puedo decirte que no sepas. Echo de menos encajar mi cuerpo en el tuyo, entrar en ti. Que abraces mi espalda. Echo de menos la extenuación desprendida y desmayada. El cansancio.
Dame tu mano.
No sueltes la mía.
Y maldigo el destiempo.
Las deshoras.
El callar.
Hola Madison, la primera en comentar, que bien! Que intensidad! Me gusta. Besos
ResponderEliminarEsto me va a hacer llorar. No se por qué..
ResponderEliminarGracias.
HK.
Lo impossible, y lo improbable era llegar a la luna, Eso no existe. Permite que siempre tu passion se alimente del fuego de tus pensamientos y si alcanzaras tus sue~os.
ResponderEliminar¿Extraño, verdad? Que la memoria vaya desvaneciéndose y el recuerdo sea cada vez más intenso...
ResponderEliminarUn beso, precioso texto :)
Breve e intensa crónica de un vacío, de cómo el sentimiento de pérdida se va haciéndo más agudo a medida que lo perdido se diluye en el olvido -que es tambien oscuro, como el café-. Se quisiera recordar un rostro, una mirada, pero toda fisonomía se escapa como un sueño en el instante del despertar: el rostro, la mirada es como esas palabras que uno tiene en la punta de la lengua, pero son tan esquivas...
ResponderEliminarUn texto tan dolorosamente intenso como el sentimiento que describe.
Yudith, me encanta tu simpatía.
ResponderEliminarY me gusta mucho verte por aquí.
Un beso
Tom, ¡¡no!! son cosas que pasan, situaciones que seguramente todos hemos vivido alguna vez.
ResponderEliminarPero yo también lloro...a veces cuando pienso.
Besos
Dificil cosa de conseguir me propones Espinar, aunque lo intento.
ResponderEliminarUnas veces creo que lo consigo y otras me desespero un poquillo.
Un beso
Son nuestros deseos de no querer olvidar que hace que nos aferremos a lo que sea con tal de retrasar lo que sabemos que algún día sucederá.
ResponderEliminarOlvidamos rostro, voz, tacto...pero recordamos la esencia, las sensaciones que nos produjo esa persona.
Gracias Explorador
Cuando las separaciones se producen por fuerzas mayores, sin que ninguna de las partes lo deseen, son más dolorosas (supongo).
ResponderEliminarY de hecho nunca se olvida, aunque el vacío sea importante.
Una canción, un olor, cualquier detalle, en cualquier instante, se presenta.
Un beso
en ocasiones, pienso demasiado en quien ya no debería
ResponderEliminarpero su recuerdo me asalta, de cualquier manera, sin avisar
no tiré sus fotos pero no es necesario ir hasta la caja de galletas para saber cómo era su sonrisa, o lo que sus ojos decían cuando callaba por horas