jueves, 10 de diciembre de 2009

Decisiones



Existen conversaciones tan agradables, tiernas y mullidas, que facilmente se convierten en caricias.
Existen otro tipo de conversaciones, que por el tono, acento, palabras, adejetivos, son como clavos ardiendo.
Conversaciones que nos aman. Conversaciones que nos dañan y lastiman.Conversaciones no aptas para nuestra salud.
Pero también exsiten palabras tan agradables que cuando van dirigidas a nosotros sientes que te abrazan y te miman.
Y palabras duras e injustas que al escucharlas lo primero que piensas es en escapar de la red que te ha hecho presa.

Me gusta hablar, hablo conmigo misma, pero me dirigo al otro, y mientras lo hago me desnudo ante miedos, oscuridades, barreras...en definitiva de todo lo negativo que observo a mi alrrededor.
Y esa desnudez, ante cualquier tipo de miedo me hace sentir libre, ligera, y mientras fluyen las palabras siento que me elevo y llego muy arriba.

Pero, en estos momentos me siento triste y agotada. Eso me hace pensar que quizá es hora de hacer balance.Tampoco es extraño, ya que estamos a finales de año, época propicia para aclarar ideas. Comprobar cómo está el activo y el pasivo. Ver cual de los dos gana. Por cual de ellos se inclina la balanza. Y si esa empresa que es mi vida dispone de suficiente liquidez.

La vida es así, hay de todo. Frustaciones, miedos, errores, decepciones, aprendizajes. Hay de todo.Somos poseedores y dueños de un poco de ese todo, incluido nuestro poder de decisión. La vida nos ofrece tantas oportunidades!!! y somos nosotros los únicos responsables de dosificar y administrar.
Somos los únicos con el poder de decisión, esto significa que cuando nos equivocamos es nuestra responsabilidad.

Es bueno hacer un alto en el camino, disponer de tiempo para poner orden.
Dejar por el camino apegos innecesarios y absurdos que no nos llevan a ninguna parte. Vaciar la mochila (yo prefiero maleta), empezar a caminar ligera y optar caminos nuevos.

8 comentarios:

  1. Pues yo hubiera jurado que preferías la mochila

    ResponderEliminar
  2. La esperanza del nuevo amanecer en el final de un ciclo. Lo hecho, lo por hacer, en una cadena de tiempo que siempre depara sorpresas si se tiene la maleta lista para llenarla otra vez, siempre dejando espacio por si alguna cosa se presenta de imprevisto.

    Gracias por tu paseo por mi mar,
    me quedo por aquí para escribir alguna carta, de esas que las letras intentan sentir algo.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  3. No vas muy desencaminado vaderetrocordero, hubo una época que fuí mochilera, pero el tiempo no perdona, y me he vuelto comodona.
    Vuelve.


    Tony yo si que te doy las gracias por tu decisión de quedarte por aquí. Para es un inmenso placer.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  4. La necesaria concentración para la reflexión, y después la decisión contra viento y marea y si nos equivocamos... asumimos. Y así se va aprendiendo de este ciclo que es la Vida, y entre balances y maletas vamos haciendo camino que diría el poeta.

    El encantamiento es recíproco.

    Un beso.

    ResponderEliminar
  5. Hermosa entrada :) . Hay veces en que después de una conversación banal queda en ti algo de más paz, o algo de más turbamiento, y no acabas de saber por qué.

    Y hay conversaciones cuando te sientes escuchado y quieres escuchar, sn pensar mientras te dicen algo en la respuesta que vas a dar, que son pura medicina.

    Sobra decir que me ha encantado lo que has escrito.

    ResponderEliminar
  6. Querida Madi:

    Has expresado perfectamente esa sensación, que algunas veces tenemos, de introspección y dudas más que tristeza. No son buenas eectivamente pero si necesarias para fortalecernos y tomar fuerzas.

    Y también es cierto que hace falta, de vez en cuando, limpoarnos de cosas que nos duelen o causan desasosiego.

    No obstante siempre admiro tu enorme sensibilidad, y me siento preocupado si tu te encuentras mal. Así qué, INYECCION DE OPTIMISMO y te envío toda la energía positiva de que soy capaz.

    Te dedicaré mi próxima entrada con unos regalos que espero te agraden.

    Besos

    ResponderEliminar
  7. Yo soy partidario de no preocuparme por nada, ser absolutamente libertario conmigo mismo. Para qué preocuparnos, si no podemos resolver los asuntos por fáciles que sean.Todo nos desborda, Por tanto hagamos como el trompetista inglés que tocó la trompeta cuando se inició el incendio en el teatro, para decir a continuación; "que nadie se m ueva, que todo el mundo permanezca en su sitio". La gente le obedeció y todo murieron achicharrados. Es un ejenplo que no sé si sirve para algo, pero me gusta mucho. Un saludo cordial.

    ResponderEliminar
  8. Dejo mi mochila
    Prefiero andar vacía y no con carga innecesaria.
    La vida consta de trancisiones.
    Brindemos por eso!

    ResponderEliminar