lunes, 27 de octubre de 2008

Cartas amarillas (II)


[por Troba]


(Retomando)


Hache, mi suspirito limeño:

Ya te había tomado la posta y me había puesto al día con tu Hi5, para conocerte un poco más, ¡también ví todas tus 81 fotos! y leí tu perfil, me causa gracia, me parece que en algunas cosas somos bien parecidos, no se si tal vez es solo mi impresión, aunque... ¿Maelo Ruiz? ¿y ese Calderon reguetonero que me dijiste? no sé los nombres de esos salchipapos, pero para qué, si me pego mis bailes de vez en cuando, ¡y hasta abajo, dale hasta abajo! en una de esas después del romance del vals podemos bailar un regueton jajaja. Claro, es lo común, seguiríamos el patrón: después del romance, el manoseo, jajaja.

Creo que hoy ya nos sinceramos más, se mucho mas de tu vida y tu de la mía. De mi parte falta poco por descubrir, si ya has leído el diario entero, pues es como si me hubieras desnudado el alma.

Sabes que me friqueaste cuando me dijiste que si te quería preguntar que sentías conmigo o algo así, yo me refería a tu vida, porque como te decía, ¿qué podría sentir conmigo alguien como tú en dos días? ¡Nada!. Seria un poco más que atrevido de mi parte preguntarte algo así Te lo juro q ue me puse nerviosa. No sé; y por si acaso no soy de indirectas. Es mas, ¡odio las indirectas! me gusta decir y preguntar bien las cosas, lo peor que me podría pasar es que no me guste la respuesta pero prefiero darme el suelazo que vivir con la duda y yo si entiendo con un nó nomás, yo pregunto claro y me gustan las respuestas claras, nada de dramas griegos, es sí o es nó, y así el cuestionado y yo, sea cual sea su respuesta seguimos frescamente con nuestras vida y todos felices o por lo menos tranquilos. Como te decía, la duda es el gusano mas dañino, se te mete y se reproduce en el corazón, en la mente, en la piel, lo peor es vivir con una duda o guardando secretos. ¡Uff! !Nada que ver!

Creo q todo eso es parte de la sinceridad, y ya te dije niño, conmigo las cuantas claras y el chocolate espeso. Hoy también descubrí un Hache súper interesante, profesor, periodista, antropólogo, ¡todo un personaje! ¡Vaya limeño! ¡Si que has aprovechado tu vida! ¡Me tienes encantada! Eres una persona de la que se puede aprender bastante. Como te dije, quisiera hablar contigo 1000 horas, para q me cuentes todas esas historias, para exprimirte el cerebro, jajaja. Inteligente e interesante, excelentes virtudes.

Bueno, como tú dijiste, solo hay que vivir y seguir caminando y ver que nos trae el futuro, sobre todo a ti Sr. Antropólogo, que tienes más posibilidades que yo de encontrar un tesoro.

¡Ah!, ya sabes cuando escuches estas canciones, trata de acordarte de que a 2000 km, 24 hrs, estoy yo, las canciones: “Llegando llegaste” de Piero ( y una mañana mientras el café mezclaba / en una servilleta blanca yo te dibujaba, yo te dibujaba), “Sea” de Jorge Drexler (Lo que tenga que ser, que sea / Y lo que no por algo ser / No creo en la eternidad de las peleas / Ni en las recetas de la felicidad / Cuando pasen recibo mis primaveras / Y la suerte este echada a descansar / Yo mirare tu foto en mi billetera / Y que sea lo que sea), “Letra de Piel” de tu Silvio (Para que no se me olvide la letra / voy a anotarla en tu piel /Sé que jamás perderé esa libreta / sé que la conservaré / Leo despacio: no eres común / luego será más lento aún / Una palabra, otra después / hasta que aprenda lo que no sé).

¡Uff! Así como tu me puedes hacer un collar con todos los besos que no te puedo dar (te salió linda esa frase), yo también te podría hacer una banda sonora con todas las canciones que se me vienen a la mente.

En fin, que puedo decirte que tu no sepas, que no te hayan dicho ya. Quisiera encontrar palabras adecuadas, pero ante alguien como tú, solo me queda el silencio e imaginar que puedo mirar tus ojos y abrazarte, nada mas.

¡Mira que mail tan largo te he escrito!… Ya te debes haber dormido... ¡Despierta!... jajaja.

Bueno, no te aburro mas, te envió un beso “que te arañe el corazón”.

Ene.

sábado, 25 de octubre de 2008

Para María

[por Desierto]

¡Qué jodido es comprobar cómo cuando creías que empezabas a alzar la cabeza, la más insignificante de las piedras que hubieses imaginado, ésa en la que nunca repararías, puede hacerte tropezar de nuevo! Y caída al vacío y llanto. Llanto de dolor puro, sencillo, aterrador y desolador que arrastra consigo todo lo hermoso que estabas creando como un tsunami endemoniado.
¡Maldita alma! ¡Maldita espina! ¡Maldito cristal de hielo que me jodes la vida!
¡Si pudiera atrapar con mis manos la llave del tiempo…! Hubiese podido elegir el momento.
Ahora estoy solo. Eso no duele. Lo curioso es que en contra de todas las predicciones draconianas, tormentosas y luctuosas, me encuentro hecho puré ahora porque es ella quien está sola. Y sufre. Ella que me ha dado consuelo. Ella que es la burla de las sirenas desagradecidas, una pobre hada de ojos negros que no hace más que buscar perdida su camino entre las espinas de los días tras días, en mañanas brumosas, frías, desoladoras en la ciudad de piedra.
María, me has devuelto la vida. Me has hecho el regalo que sabías que destruiría tus ilusiones como esa joven rebelde que se atreve a desafiar a sus dioses para entregarse a un vampiro.
Quisiera encontrar las fuerzas para poder terminar mi relato con la misma historia de redención.
Lo sé. Triste consuelo el del amado en las ausencias…

Mais n´oubliez jamais, ma pettite fée avec noires oeux.

lunes, 20 de octubre de 2008

Cartas amarillas (I)

[por Troba]

Es una historia que tiene que ver con el curso de la Vía Láctea.
(Silvio Rodríguez)

¡Hola suspiro limeño!

Mmmmmm ...

¡No puedo creer que te hayas puesto a leer esas cartas pasadas, que vergüenza!

Sabes, en un principio empecé a escribir por joda y luego esto se convirtió en mi desahogo, así que por eso vas a encontrar casi que de todo y como te decía es muy personal, así que bueno, ni como mentirte aunque quisiera… ja ja ja .

En serio gracias por tus palabras, tu tiempo, tu voz, tus labios y tu lengua también... ja ja ja .. Te la voy a arrancar y a ponermela en el cuello cual medalla... ¿Alguna reina de alguna tribu hace eso, Sr. Antropológo? ¡Qué freak el dar contigo!, el destino, Dios o lo q sea, me hizo irresponsable ese día solo para poder conocerte... Imagínate salgo en pijama rosado y me encuentro un antropólogo rondando por cajita de pandora... ¡Que sui generis! Y terminamos hablando por horas de tetas, penes, política, música... nos falto religión.... jajaja.

En fin, chévere porque casi que nos gustan las mismas cosas y eso es difícil de encontrar al menos para mí ... ya ves todos mis amigos son fans de Arjona como máximo.... y ahora tengo q ir a Chayanne... a abrazarme sola.. Pero ya estoy haciendo una selección musical pepa para mi ipod... jajaja... Pero cuando el man cante "Tiempo de Vals" me corto las venas con un tostito, jajaja.

No sé, no lo tomes a mal... no te frikees ni nada, pero te confieso que me quedé encantada contigo, no te conozco (y nunca me dijiste como era tu nariz, jajaja) pero por lo que hablamos pareces buena gente ... espero que no sea la fachada de un psicópata ... jajaja ... es que ya ves que en esta vida nada es como parece.

¡Y tu voz! me encanta tu voz ... ese acento tan pausado y tranquilo y sereno, como cuando te pones un caracol al oído, como brisa marina .... ¡ah! Me gusta muchísimo el acento de los limeños ... D. (el chico peruano) habla casi como tu ... con esa paz que te relaja y es mejor que sesión de spa... full relax, take it easy... ¡Por cierto! ya arreglé el cuarto... para ese entonces ya habia pasado mucha agua bajo el puente, pero excelente terapia aceptar, enfrentar y asumir los problemas... de todas maneras con Equis yo ya no tenía vida ni esperanza... estábamos por... ¡chuta, no sé ni porqué!... ahora, estoy bastante tranquila... respirando nuevos aires ... mas que arreglar el cuarto, estoy arreglando mi vida... pero ya son más bien detalles técnicos ... el tema Equis, gracias a Dios está siendo bien superado ... yo pensé q me iba a morir , pero nada... estoy bien, sospechosamente, demasiado bien ... mejor así … y claro que podemos elegir nuevos tapices y matices para continuar y mejor si me ayudas, jajaja ... de antropólogo a decorador de interiores ... ¡interesante! jajaja.

Bueno, hasta ahora me gustan muchas cosas tuyas... Un " film noir frances"... increíble... ¡que mejor!, !intéressant mon amou! ...

"quiero ser el ultimo cigarrillo que moja tus labios, la colilla que unta las yemas de tus dedos"...

¡Uf! Oye, no me hagas eso, si me pones Roberto Carlos de fondo me voy al Perú, y sin ver nada, te agarro, te arrincono, te beso y... nada mas... ya quedamos en nada sexual... jajaja ... ¡pero no abuses que no respondo!

Nuevamente, gracias por aparecer en la forma en que lo hiciste, por tu tiempo y por todo... eres un sol...

Miles y miles de besos y abrazos,

Ene.


viernes, 17 de octubre de 2008

Con los cinco sentidos

[por Gaviero]

La jornada de hoy había sido excesivamente cansada, toda la mañana de reuniones de trabajo discutiendo con los bancos, los abogados y los directivos de la empresa que mi compañía iba a absorber; afortunadamente conseguí librarme de la cena con la que pretendían halagarme y estaba sentado en una terraza tomando un café reflexionando sobre los hechos del día y prácticamente sin prestar atención a nada.

De repente tuve la sensación de estar siendo observado, alce los ojos y descubrí en otra mesa casi enfrente de la mía a una mujer que me miraba fijamente. No pude por menos de quedármela yo también mirando, era morena, con el pelo relativamente corto y rizado, no era una gran belleza pero su rostro tenía un aire risueño, con facciones relajadas y el apunte de dos hoyuelos en las mejillas, sus ojos eran oscuros y grandes, marrones, casi negros y cargados de una viveza chispeante que acentuaban la sensación de simpatía que toda su cara reflejaba.

Nos quedamos un rato, que me pareció toda una eternidad, con los ojos clavados uno en el otro hasta que esbozando una amplia sonrisa se levantó y se acercó a mi mesa: “hola, soy Gabriela”, me dijo, “¿te importa que me siente?, añadió. Yo, un poco turbado, me levanté rápidamente y separé una silla mientras respondía: “por favor, siéntate… “. Antes de que pudiera darme cuenta ya había tomado asiento y empezado a hablarme, “te he visto y me ha parecido que te conocía de siempre….”, su voz me tenía embelesado, “…. se que no es así pero me pareces tan próximo a mi….”, seguía percibiendo sus palabras pero no lograba entenderlas, “por cierto, no se aún tu nombre”, “….. Luís, me llamó Luís” apenas logré decir. Y de esta manera, a la impresión de su visión se añadió ahora el placer de oír sus palabras.

Medio repuesto de la impresión pude seguir la conversación, hablamos de casi todo, de la vida cotidiana, de nuestros trabajos, de nuestras ilusiones, de nosotros. En un determinado momento, al prorrumpir en una risa que me sonó maravillosa, Gabriela movió bruscamente su cabeza y una vaharada de su perfume inundó mis fosas nasales. Su olor, su aroma, algo impactante penetró hasta mí, no era sólo el perfume que llevará, olía toda ella, una nueva sensación recorrió todo mi cuerpo alterándome, a la vista y el oído se unió ahora el olfato.

Ella se dio cuenta y sonriéndome puso su mano sobre la mía; noté como una descarga eléctrica y no dude en corresponder y cogernos ya de la mano. Jugueteamos con nuestros dedos como dos chiquillos y recordé la primera mano de una niña que estreche.

“Te has dado cuenta que hemos disfrutado de todos nuestros sentidos en un breve espacio de tiempo”, dije; Gabriela volvió a sonreír y, muy bajito, respondió “no, falta uno, el gusto”, y en una décima de segundo su boca se posó en la mía y pudimos saborear este último sentido en un húmedo, largo y apasionado beso.

jueves, 16 de octubre de 2008

Plusvalia en una noche de verano

[por Madison]

Hay momentos, sobre todo últimamente, en los que me pregunto por qué continuamente me estoy cuestionando tantas cosas de mi vida. Y por qué estoy pensando en el final de algo antes de que llegue, por qué no disfruto del momento y dejo de pensar en lo que me tocará sufrir si no sé si eso sucederá. Las cosas buenas que nos da la vida debemos disfrutarlas y gozar de ellas mientras éstas duren. Y si tenemos la suerte de que haga acto de presencia en nuestra vida es porque nos lo hemos ganado. Siempre es bueno sumar energia positiva y restar importancia. Cuando se termina nos queda el recuerdo. Evocar momentos puede ser... es, formidable.

Estos días he cambiado de bolso, he dejado el que llevaba de verano por otro mas acorde a esta estación en la que hemos entrado. Mientras tocaba las cosas que había dentro de ese bolso de verano me he visto transportada a un dia y una noche en particular. Un billete de tren, una revista, un brazalete de esos que te colocan cuando ingresas en el hospital, un informe del mismo hospital, unas recetas que no utilizé, un tiquet de gasolina, un tornillo caido de la matricua del coche, un trozo de precinto que utilizé para solucionar el problema del tornillo, un mensaje enviado comunicando que esa noche estaría ahí, un mensaje recibido que dice "yo también", un Cd de música instrumental... y por último y lo más importante una documentación que hace referencia a una plusvalía.... estuve durante horas comentando sobre ella y gozé mucho con esa plusvalía. Esos recuerdos, pase lo que pase, siempre van a estar ahí, presentes y vivos como en esa noche.

Y ahora me encuentro aquí. Sentada. Evocando todas esas ideas que pasean por mi cabeza junto a su recuerdo. Y sonrío, me hacen feliz esas ideas por su capacidad para remitir al deseo, también a algunas expresiones. ¡Qué hermosos son todos esos objetos que he encontrado en el bolso!
A simple vista parece poco, pero no es así, desde mi percepción esas pequeñas cosas en estos momentos lo son todo

Buenas noches

martes, 14 de octubre de 2008

Busca la Belleza

[por Madison]

Ya sabes que de un grano de arena hago una montaña y que muchos dias que podemos disfrutar juntos los rechazo. Después siento rabia porque por una nadería esos días quedan como no vividos. Sin poderlo evitar me veo transportada por una corriente fria, casi helada, esa corriente me lleva a unas aguas muy oscuras y feas... Siento pánico al pensar si es esa mi esencia más íntima, la verdadera.

Hoy tengo suerte, he sido capaz de hacer real tu frase diaria de despedida..."busca la belleza"
Esta tarde me siento en paz conmigo, pero como dudo bastante que esto dure demasiado prefiero dejar constancia aquí en este pequeño rincón. Y ojalá cuando vuelva a estar mal sea capaz de dirgirme aquí y ya sabes...pensar en lo bueno de las cosas.

La confianza nos hace sentir que somos personas hermosas, hoy me siento bella, observo a mi alrededor y en todo hay belleza. Te veo y cuando mi mirada llega a ti hace un alto. Cosquilleo. Es agradable sentir cosquillas en el estomago que van recorriendo todo el cuerpo. Nuestras manos están entrelazadas . Es extraño. Son sensaciones extrañas.

Aquí me tienes, escribiendo estas palabras; mientras lo hago respiro profundamente y noto con qué facilidad me crezco ante todo. Ese aire fresco que entra y sale de mi es como una caricia. Gozo y participo con ella. Me preparo para viajar, lo hago muy ligera de equipaje, solo llevo sitio para tu corazón y el mío.

Gracias por escucharme, por ayudarme a levantarme en esas caidas continuadas. Gracias por desear que iniciemos ese viaje juntos. Gracias por estar, por no mal interpretar. Gracias por hacerme comprobar que en ocasiones la realidad es bella y que los momentos perfectos existen.

lunes, 13 de octubre de 2008

Estrella

[por Madison]

Esta carta va dirigida a ti, deseo que te identifiques con todo lo que en ella digo.
Aunque quizás te resulte un poco difícil, porque la verdad es, que lo que es escribir no se demasiado, a lo más que puedo aspirar es a juntar palabras y que éstas lleguen a tener algún sentido.

En las noches claras me gusta mirar al cielo, puedo pasar bastante rato contemplándolo; al mismo tiempo observo las miles y miles de estrellas que en él hay. Apenas conozco el nombre de ellas aunque se que las hay más famosas unas que las otras. Pero por más que contemplo absorta ese espectáculo vespertino no acierto a ver qué es lo que las diferencia, su luz es la misma, la atracción que ejercen sobre mi también.
Siento que no necesitan tener nombre propio para iluminarnos, ni para contagiar su magia

Y aunque no sepa el nombre de ninguna, sí me fijo siempre en una en particular, incluso creo que me mira de forma distinta a las otras. Eso me lleva a pensar que todos tenemos nuestra estrella particular

Estoy segura que la tuya, también está ahí, no la dejes escapar, mírala; ella te conoce, te sonrie, te ilumina, te acompaña en tu camino. Esa estrella querido amigo tiene un nombre y sabes cual es, llámalal y verás cómo te responde. Déjate llevar y podrás viajar por paisajes nuevos que acabas de descubrir. Te hará ver tanta belleza que jamás volverás a sentir que esa estrella es anónima.
Con mis mejores deseos.

miércoles, 8 de octubre de 2008

Conversaciones

[por Madison]

Hacía un tiempo que no me conectaba al MSN, pero hoy lo he hecho. Me encontraba mirando unas cosillas y veo a álguien que entra a saludarme.

- Hola dama qué me cuentas?
- Hola!!!
-Dime que tal por Barcelona?
-Bien, y por América?
-Pués aquí como siempre....(la respuesta prefiero omitirla)
-Cuéntame todo lo que has leido durante este tiempo, dime que estás leyendo ahora
-Antes quiero decirte que estoy muy contenta de poder saludarte
-Yo también, te echaba de menos, por eso he entrado. Dime en qué estás?
-Pués ahora estoy con el libro de Bruce Chatwin, sí el de Patagonia
-En serio? no sabes cómo me alegra oirte eso, creí que nadie leía a Chatwin. Dime, ¿cómo supiste de él, por Sebald?
-No, la verdad es que le conocí por sus libretas
-A mi me entusiasma todo lo escrito sobre aquella tierra
-Lo se, recuerdas Tierra Púpurea? Yo sí
- Claro que la recuerdo, es una delicia, es un libro maravilloso, de hecho cualquier libro de W.A. Hudson es maravilloso.
Sí, es cierto. ¿sabes? me cuesta mucho leer
-Bueno supongo que has llegado a la diferencia entre lector y lector compulsivo
-Sí, supongo que sí.
-Bien, pués nada más Madi, ya continuaremos esta conversación en otro momento.
-De acuerdo hasta pronto

Qué buenos recuerdos han venido a mi mente. Hace unos años coincidimos en un foro de literatura, casi entraba exclusivamente para leer sus comentarios y unas cuantas prsonas más, de él aprendí quién era Sebald, Lobo Antunes, y otros muchos.

Tímidamente iba escribiendo mis anotaciones, un día se interesó por ellas y así se inició un compañerismo fantástico. Yo le admiraba a él en silencio. El me admiraba a mi en silencio. Hasta que un día hablamos los dos y nos sorprendimos los dos. Qué tontos por callar durante tanto tiempo.

Muchas gracias por enseñarme tanto Fernando, alias Me llamo Rojo, Fernando Silvestre, Imitador de Voces y algún otro nick me dejo, iba variando de forma iba leyendo títulos que le gustaban. Es un lujo enorme sentirme amiga de un lector tan ilustre y es un halago enorme que él crea que soy gran lectora.

Por este medio, como es internet también se encuentran personas autenticas, con una calidad humana increible.

viernes, 3 de octubre de 2008

Tiempo

[por Madison]

El inicio de esta semana fue un poco malo, en muchos momentos el desánimo se acomodó de forma permanente en mi, la tristeza y la melancolía también hicieron de las suyas.
Siento rabia e impotencia cuando aún sabiendo que tengo a gente que me quiere, me siento incomprendida o quizás no tan correspondida como necesito.
La sensación de derrota por no saber transmitir mis sentimientos me hacen desfallecer.
Me gustan las personas que viven con la sensación de que nunca pierden, supongo que eso se consigue poco a poco o quizás sea una cualidad que solo la tienen unos cuantos afortunados.
No quiero ser una perdedora Quiero saber aceptar las derrotas, porque forma parte de la vida. Pero me niego a vivir pensado que nunca llegaré a alcanzar lo que deseo.
Tanto en el amor o en la amistad la entrega debe ser absoluta, incondicional y en todo momento luchar para que ese sentimiento no tenga fecha de caducidad. La semana termina, lo hace de una forma hermosa, me siento llena de agradecimiento, amistad, amor. Siento plenitud. Por suerte me he recuperado de ese malestar inicial. Tengo fuerza de voluntad, así que mi aprendizaje y sentimiento de superación ayudará, quiero y pienso seguir descubriéndome, porque ese es el camino para crecer.
El tiempo con el que cuento es algo limitado por eso me propongo ser selectiva, y por eso cuando tú me regalas un rato de tu tiempo voy a escuchar todo lo que tengas que decirme. Así poder crear un espacio selecto para nuestros pensamientos, palabras, silencios….y cuando consiga todo eso me despertaré con una sonrisa porque seré capaz de ver tu realidad como si fuera la mía.